Si está de humor para los dulces, no tiene que soportar automáticamente toneladas de calorías. Innumerables alternativas artificiales prometen placer sin remordimientos.
Pero los edulcorantes no siempre tienen la mejor reputación. Por un lado, el sabor a menudo antinatural es un problema, simplemente no se puede comparar con el azúcar real.
Por otro lado, hay muchos rumores desagradables sobre los marcadores de posición dulces: son cancerígenos, sin duda causarían antojos y, en última instancia, alentarían a las personas a comer mucho más de lo que deberían, dicen.
En vista del rápido avance de los sustitutos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) encargó a un equipo internacional de investigadores que resumiera y evaluara los hallazgos mundiales sobre los edulcorantes.
Sin embargo, aquellos que esperaban instrucciones precisas sobre el consumo de sustitutos del azúcar se sentirán decepcionados: incluso después de un análisis exhaustivo, los investigadores llegaron a la conclusión de que los datos recopilados aún son insuficientes para ser realmente significativos.
Por lo tanto, los conocimientos adquiridos deben tratarse con cautela. No obstante, están surgiendo ciertas tendencias que los científicos confían en que algún día se probarán definitivamente.
Edulcorantes: No aptos para dietas
Las malas noticias primero: en general, parece que es poco probable una pérdida de peso importante a largo plazo debido al mayor uso de edulcorantes.
Sin embargo, eso no significa que deba volver directamente al azúcar real, sino todo lo contrario.
En un comentario complementario sobre el estudio, Vasanti Malik de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard ve espacio para los edulcorantes, especialmente como un punto de partida para las personas a las que, por ejemplo, les gusta consumir bebidas dulces.
Si bien el agua es preferible a largo plazo, las bebidas dietéticas pueden ser de gran ayuda a corto plazo. No se ha demostrado que los edulcorantes provoquen la sensación de hambre.
El edulcorante no es solo edulcorante
Muchas personas están particularmente interesadas en los efectos de la dulzura artificial en nuestra salud.
Nuevamente, las noticias son decepcionantes: simplemente no es posible decir con certeza si los sustitutos son realmente seguros o si su uso continuado aumenta el riesgo de cáncer o diabetes.
En parte, eso se debe a que hay demasiadas variaciones diferentes: ya sea ciclamato o aspartamo, y especialmente en los últimos años, se ha potenciado la stevia; los científicos han señalado que cada ingrediente tiene efectos diferentes.
Por lo tanto, se requiere una investigación mucho más específica para corroborar o descartar los riesgos para la salud.
Conclusión: En general, no es mala idea limitar el consumo de dulces. Pero no espere perder kilos simplemente sustituyendo el azúcar por edulcorantes.
Si no está seguro acerca de los efectos a largo plazo de los edulcorantes debido al conocimiento no seguro, probablemente sea mejor prescindir de ambos.